Con el objetivo de apoyar a personas y familias afectadas económicamente por la crisis ocasionada por el COVID-19, se creó el Fondo Bono Familia a cargo del Ministerio de Desarrollo Social -Mides-, el cual resulta de un trabajo a nivel interinstitucional e intersectorial.
Las tres intervenciones bajo la responsabilidad del Mides durante la emergencia son totalmente nuevas, lo que implicó un diseño en tiempo récord, puesto que no existía en Guatemala una plataforma con esta magnitud. Los programas sociales del Ministerio cubrían hasta entonces a unas 126 mil personas usuarias en todo el país; mientras que con esta modalidad se alcanzará a más de 4.5 millones de beneficiarios.
En el caso de Bono Familia, varias instituciones del Estado han trabajado conjuntamente para realizar cruce de información en la base de datos que establecerá el padrón de beneficiarios, tales como: Comisión Nacional de Energía Eléctrica -CNEE-, Instituto Nacional de Estadística -INE-, Registro Nacional de las Personas -Renap-, Ministerio de Finanzas -Minfin-, Instituto Guatemalteco de Seguridad Social -IGSS-, Superintendencia de Administración Tributaria -SAT- y Oficina Nacional de Servicio Civil -Onsec-, entre otras.
Por parte de la Cooperación Internacional, Banco Mundial -BM- y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia -Unicef-, apoyaron técnica y financieramente para la construcción de la plataforma tecnológica para registrar a unos 2 millones de beneficiarios tan solo en el Bono Familia. El sistema bancario nacional también se unió al esfuerzo para facilitar el traslado de fondos a las personas usuarias; y varias empresas privadas, para fungir como centros de canje de productos para el hogar en busca de satisfacer las necesidades básicas de la población.
