El ministro de Desarrollo Social, Ennio Galicia, participó en la presentación y entrega de la serie “The Lancet”; una guía basada en evidencia científica para sus acciones en favor de la primera infancia, organizada por UNICEF.
Esta nueva serie fundamenta intervenciones y propone medidas a ser aplicadas en los programas de desarrollo infantil a gran escala. Además, hace hincapié en el “cuidado cariñoso y sensible a las necesidades del niño”, sobre todo hasta los tres años de edad, así como en las intervenciones multisectoriales que tomando el sector salud como punto de partida, permiten llegar a muchas familias y niños pequeños a través de la salud y nutrición.
La serie revela que las intervenciones estratégicas e integrales en la primera infancia permitirán romper los círculos viciosos de la pobreza y desigualdad. La misma promueve una atención sensible a las necesidades de niñas y niños –salud, nutrición, cuidados, seguridad y aprendizaje temprano–. Se requiere de una inversión de apenas 50 centavos de dólar por niño al año, si se combina con servicios existentes, como los sanitarios.
En Guatemala se estima que la población menor de 6 años es de 2,7 millones; alrededor de 1 millón vive en condiciones de pobreza y 800 mil en extrema pobreza. Muchas niñas y niños presentan desventajas incluso antes de nacer. La mortalidad materna es de 108 por cada 100 mil nacidos vivos, una de las tasas de mortalidad más altas de América Latina. Así mismo, por cada mil niñas y niños nacidos vivos, 30 mueren antes de cumplir el año (el doble que el promedio en América Latina).
La desnutrición crónica afecta a 1 de cada 2 niñas y niños menores de 5 años y la cobertura pública en el ámbito del aprendizaje temprano es casi inexistente desde el nacimiento hasta los cuatro años y la educación inicial de 4 a 5 años alcanza al 13.4%.
Los autores proponen varias maneras en que la comunidad mundial puede ampliar el apoyo a los servicios destinados al desarrollo en la primera infancia:
- Alentar la adopción y la aplicación de políticas sobre creación de entornos acogedores para que las familias proporcionen atención amorosa a los niños.
- Fomentar la capacidad y fortalecer la coordinación para promover el desarrollo en la primera infancia a través de los servicios existentes de salud, nutrición, educación, así como de los servicios sociales y de protección infantil.
- Fortalecer la medición y garantizar la rendición de cuentas por parte de los servicios dedicados al desarrollo del niño en la primera infancia.
- Promover investigaciones, fomentar el liderazgo y la participación mundial y regional.
- Ampliar la voluntad política y la financiación mediante la promoción de los Objetivos de Desarrollo Sostenible -ODS-.
