Tranquilidad y satisfacción son sentimientos que embargan a tres de las primeras 29 familias que fueron trasladadas a la finca La Industria, Escuintla; área en la que en una efectiva coordinación interinstitucional encabezada por el Ministerio de Desarrollo Social se instalaron 250 Albergues de Transición Unifamiliares -ATUs-.
Genaro Godínez Son, junto a su esposa, dos hijos y una nieta de tres años, forman parte de las miles de personas que sufrieron la tragedia provocada por la erupción del Volcán de Fuego. Desde ese fatídico 3 de junio permanecieron en el albergue temporal ubicado en la Escuela Oficial Urbana Mixta Tipo Federación, José Martí, en Escuintla.
Sus palabras son contundentes. “Gracias al Gobierno de Guatemala porque esto es un regalo y una bendición; porque no nos conocen y sin embargo nos han ayudado con techo y alimento”, afirmó Godínez al estar ya instalado en el complejo donde permanecerá junto a su familia mientras se termina la construcción de viviendas permanentes a donde serán trasladados una vez estén terminadas.
Mientras tanto, Alex Mijangos, quien todavía lamenta la pérdida de su madre y cuatro integrantes más de su familia, afirmó que junto a su esposa y dos hijos, “se sienten más cómodos porque hay más privacidad y podrán dormir tranquilos” en el Albergue de Transición Unifamiliar al que fueron trasladados.
Laura Monenjón también se mostró agradecida con la asistencia integral brindada por el Ministerio de Desarrollo Social, ya que perdió todo lo que tenía al ocurrir el desastre natural, luego de 41 años de vivir en la comunidad San José Los Lotes. La tragedia también cobró la vida de 13 de sus familiares.
“Gracias al gobierno a las personas que han ayudado con la donación de víveres, a las personas que han ayudado para la construcción de los cuartos, ahora nos sentimos más cómodos”, fueron las palabras de Laura luego de recibir el primer tiempo de comida en la finca La Industria.
