Luego de casi cuatro meses de interpelación en el Congreso de la República de Guatemala, la semana pasada finalizó el proceso para el ministro de Desarrollo Social, Raúl Romero Segura.
En cumplimiento de la ley y respetando el derecho constitucional que tienen los parlamentarios para requerir cuentas a las entidades gubernamentales, Romero asistió a las citas que conformaron la interpelación planteada por el diputado Aldo Dávila de la bancada Winaq.
A pesar de las dificultades y retos que conllevó el año 2020 a causa de la pandemia COVID-19, la crisis financiera y los fenómenos climatológicos Eta e Iota, durante las reuniones en el pleno se evidenció el cumplimiento del Ministerio de Desarrollo Social -Mides-. Logró un 96% de ejecución presupuestaria y un desarrollo eficiente de los programas sociales permanentes y las intervenciones que se establecieron temporalmente para apoyar a la población vulnerable.
Ahora que concluyó el proceso para aclarar los cuestionamientos en el Organismo Legislativo, Romero podrá dedicarse a sus responsabilidades ministeriales completamente, retomar temas y proyectos pendientes, y establecer procesos con mayor transparencia dentro de la Institución para rendir cuentas fácilmente en el futuro.