La Navidad llegó a los Comedores Sociales del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), con un menú especial que resalta la riqueza cultural y las tradiciones guatemaltecas. En un gesto de unión y celebración, los usuarios de varios comedores disfrutaron de tamales rojos y ponche de frutas, dos emblemáticos platillos que llenaron de calidez y alegría estos espacios.
“Se organizó un menú especial para los Comedores Sociales. Les deseamos con mucha alegría ¡felices fiestas!”, expresó Bertha Zapeta, Viceministra de Protección Social, quien destacó que esta iniciativa busca no solo fortalecer la seguridad alimentaria, sino también celebrar la identidad cultural que une a las comunidades.
El tamal, símbolo de la gastronomía guatemalteca, tiene raíces profundas en la época prehispánica y se ha convertido en un platillo esencial de las festividades navideñas. Elaborado con masa de maíz, tomate, carne y envuelto en hojas de maxán que le aportan su característico aroma, representa un lazo cultural que conecta generaciones y regiones del país. Por su parte, el ponche de frutas, con su mezcla de sabores dulces y especiados, es el acompañante perfecto para completar esta celebración.
Los Comedores Sociales, creados bajo el acuerdo ministerial 03-2012, son una herramienta fundamental para garantizar la seguridad alimentaria y nutricional de las comunidades más vulnerables. Con 90 comedores en funcionamiento a nivel nacional, el Mides no solo lleva alimentos a quienes más lo necesitan, sino que también busca preservar y promover las tradiciones que forman parte del corazón de Guatemala.
Esta acción reafirma el compromiso del Gobierno del Presidente Bernardo Arévalo y del Ministerio de Desarrollo Social, bajo la coordinación del Ministro, Abelardo Pinto, por garantizar una alimentación digna con pertinencia cultural, en cumplimiento de lo que dicta la Ley del Sistema Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional. Más allá de un simple alimento, esta actividad simboliza la unión, la inclusión y el bienestar de las familias guatemaltecas en un momento tan especial como la Navidad.
En cada comedor donde se sirvió este menú navideño, el ambiente se llenó de sonrisas, historias compartidas y el aroma inconfundible de los tamales y el ponche, recordando que, incluso en tiempos difíciles, las tradiciones y la solidaridad son el corazón de Guatemala.