En el 2020 el Gobierno de Guatemala estableció diez intervenciones para apoyar a las personas más vulnerables ante la pandemia del COVID-19, entre éstas el Fondo Bono Familia a cargo del Ministerio de Desarrollo Social -Mides-. Se dirigió a hogares cuyo consumo energético del mes de febrero del mismo año fue menor o igual a 200 kWh y contempló hasta un 10% de su presupuesto (Q.6,000,000,000.00) para quienes no cuentan con este servicio.
El Programa prioriza a personas en pobreza, madres solteras u hogares monoparentales, adultos mayores, personas con discapacidad o enfermedades crónicas y degenerativas, y familias con niñas/os en estado de desnutrición. Consistió en dos aportes económicos de Q.1,000.00 cada uno, y un tercero de Q.250.00.
En el marco de la política social que se implementa en el país, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia -Unicef- y el Banco Mundial -BM-, brindaron asistencia técnica en el desarrollo de un sistema de información para organizar el proceso de registro de personas candidatas para ser usuarias y a la vez, para iniciar con el proceso de construcción del Registro Social de Hogares, en conjunto con otras agencias del Sistema de Naciones Unidas -SNU-.
También se brindó apoyo para la construcción del Sistema de Información del Bono Social -SIBS-, que conllevó procesos de automatización de la Ficha de Evaluación de Condiciones Socioeconómicas -FECS-.
Compromiso de la Cooperación Internacional
Ahora que finaliza el presente año, ambos organismos internacionales entregan los informes de la asistencia técnica otorgada al Ministerio de Desarrollo Social.
Carlos Carrera, representante de Unicef, y Danilo Mazariegos, representante del Banco Mundial, reiteraron al ministro de Desarrollo Social, Raúl Romero Segura, su soporte al Mides y su compromiso por continuar con la asistencia técnica, la transferencia de tecnología y conocimiento para fortalecer las capacidades institucionales y la construcción de un sistema de protección social en Guatemala que sea sensible a la infancia y adolescencia.
El ministro Romero agradeció todo el apoyo y acompañamiento de Unicef y Banco Mundial, afirmando que fueron un factor clave para agilizar los procedimientos de atención a las personas vulnerables durante una emergencia de esta magnitud y para ejecutar el Programa con transparencia.
“Guatemala está sumamente agradecida con ustedes por su entrega y su noble corazón. No solo pudimos asistir en el ámbito de la economía familiar a las personas más necesitadas, sino ahora contamos con capacidades técnicas que fortalecerán la construcción de un Registro Social de Hogares en Guatemala”.